¿Vallas metálicas forjadas o de sistema? ¿Malla clásica o tal vez un gavión de piedra?
Las cercas de hierro forjado parecen elegantes, casi lujosas. Se pueden pedir en cualquier patrón, más simple o más estilizado. Los elementos forjados de la cerca se pueden apuntar, lo que crea dificultades adicionales para posibles intrusos.
Las vallas forjadas son extremadamente duraderas y no requieren ningún mantenimiento.
Desafortunadamente, esta es una inversión que consume mucho dinero. Además del material en sí, la instalación debe realizarla una empresa profesional.
Las cercas de malla son el material más barato, pero también el menos duradero. Esta solución amigable con la billetera, sin embargo, está muy lejos
detrás en términos de funcionalidad. La malla debe restaurarse de vez en cuando, y pintar dichas superficies puede ser realmente problemático. Cuando se trata de ventajas, combinadas
con una adecuada vegetación trepadora puede dar un efecto muy estético, que además reducirá la visibilidad desde el exterior. Aunque, por supuesto, no será tan eficaz como en el caso de una pérgola clásica.