El ginseng es una planta a la que durante mucho tiempo se le han atribuido poderes mágicos y se consideraba una cura milagrosa para todas las dolencias. La investigación moderna confirma que tiene muchas propiedades beneficiosas para la salud.
La medicina tradicional oriental nos resulta cada vez más interesante, ya que a menudo resulta muy eficaz. Desafortunadamente, no tenemos acceso a la mayoría de las hierbas y preparaciones de plantas orientales, pero hay varias plantas medicinales que podemos comprar en cualquier farmacia o tienda de hierbas, e incluso cultivar en nuestro propio jardín.
Uno de ellos es entre otros ginseng, también conocido como ginseng. Esta extraordinaria planta de origen chino ha ganado una enorme popularidad en todo el mundo, tanto por sus propiedades medicinales como por las leyendas asociadas a ella.
El ginseng es una herbácea perenne de apariencia engañosamente ordinaria con hojas interesantes, hermosas flores y hermosos frutos rojos. Su singularidad, sin embargo, está escondida bajo tierra, donde se desarrolla una raíz principal débilmente ramificada con numerosas raíces de cabello pequeñas (hay brotes durmientes en la raíz y uno en invierno, cuyo daño hace que la planta caiga en un largo sueño, porque el recrecimiento de los ojos dormidos solo puede tener lugar) después de 20 años).
La raíz milagrosa de ginseng
La estructura de la raíz se asemeja a una figura humana (esta es la fuente de mitos y leyendas) y es rica en numerosas sustancias biológicamente activas con propiedades curativas. Inicialmente, el ginseng se valoraba como una panacea para todas las enfermedades. En la antigüedad, se usaba, entre otras cosas, para fortalecer los órganos más importantes como el corazón, los pulmones, los riñones y el hígado, se administraba a las personas mayores para aumentar su vitalidad y se usaba como fármaco para potenciar.
También se le atribuyó a muchas otras propiedades, como un efecto positivo sobre la memoria y la concentración, aumento de la resistencia al estrés, fortalecimiento de la vista y efectos rejuvenecedores.
Actualmente, la investigación científica realizada sobre las propiedades curativas del ginseng ha confirmado algunas de las propiedades milagrosas que se le atribuyen. En la raíz, i.a. glucósidos, aceites esenciales, vitaminas (principalmente vitamina B y vitamina C), minerales (magnesio, hierro), saponinas, grasas, pectinas y muchas otras sustancias valiosas.
Para que ayuda el ginseng

La presencia de vitaminas B y magnesio en la raíz de ginseng también tiene un efecto positivo en mejorar el trabajo del cerebro y fortalecer el sistema nervioso, lo que apoya la memoria, la concentración y la capacidad de aprendizaje, además de mejorar el rendimiento mental y aumenta la resistencia al estrés. El ginseng también estimula el sistema inmunológico y ayuda a combatir las infecciones.
El ginseng también reduce el azúcar y el colesterol en sangre, actúa como anticoagulante, alivia los síntomas del envejecimiento (en la menopausia y la andropausia), fortalece el corazón y regula la economía hormonal del cuerpo (apoya el funcionamiento de las glándulas sexuales), influyendo positivamente en la potencia en tanto hombres como mujeres.
Nota: el ginseng no es para todos
Desafortunadamente, no todo el mundo puede disfrutar de los beneficios del ginseng. Hierbas no debe tomar personas que padecen hipertensión, aterosclerosis, trastornos de la coagulación sanguínea y mujeres embarazadas y lactantes.
Tampoco debe usarse con algunos medicamentos (por ejemplo, medicamentos que se toman para la trombosis venosa, preparaciones a base de hierbas para fortalecer el cuerpo, antidepresivos, hormonas esteroides, glucósidos cardíacos).
También es arriesgado sobredosis preparaciones de ginseng, ya que puede causar, entre otros dolores de cabeza y mareos, náuseas o discapacidad visual.
¿Ginseng en tu propio jardín?
Curiosamente, el ginseng, conocido principalmente en los estantes de las farmacias, también se puede cultivar en su propio jardín. Aunque no es una tarea fácil, ya que la planta es muy exigente (sobre todo, es sensible a demasiada luz solar y a una posición húmeda en invierno, y susceptible a enfermedades fúngicas, y sus semillas germinan mal y durante mucho tiempo). , pero si tiene éxito, nos proporcionará una gran satisfacción.