Uso de productos fitosanitarios:
- Utilice siempre los productos fitosanitarios recomendados por el fabricante. Leamos las instrucciones de uso en la etiqueta, porque cada preparación funciona de manera diferente y requiere la dosis correcta.
- Preparemos solo la cantidad de preparación que necesitamos. Los productos químicos no deben almacenarse durante mucho tiempo, ni deben verterse en el sistema de alcantarillado. Si nos queda algún remanente del agente en el pulverizador, lo diluimos y lo usamos en las plantas sobre las que realizamos el tratamiento.
- Usamos ropa protectora para realizar el procedimiento. La ropa debe cubrir toda nuestra piel. Si queremos rociar árboles o arbustos altos, también debemos ponernos gafas protectoras y una gorra.
- Los productos fitosanitarios son sustancias venenosas; no los pruebe ni fume. También limitemos la inhalación de estas sustancias; es mejor rociarlas en un día sin viento.
- Si se pronostica lluvia para un día determinado, no debemos rociar; la lluvia puede lavar el agente de las plantas y reducir su efectividad. Si la temperatura del aire es demasiado alta, los productos químicos pueden quemar las plantas cuando se combinan con agua, actuando como una lente.
- Siga los períodos de gracia, es decir, el tiempo que debe pasar desde la pulverización hasta la recolección de la fruta.
- Utilice guantes protectores durante la preparación y pulverización. Lávese bien las manos después del procedimiento. La ropa protectora debe lavarse y enjuagarse a fondo.
- ¡Protejamos a los niños del contacto con productos fitosanitarios! Los contenedores en los que almacenamos productos químicos deben almacenarse en armarios cerrados con llave.
- Los recipientes del rociador deben lavarse y secarse después de cada tratamiento. Los productos químicos no deben mezclarse entre sí. Los envases vacíos de productos fitosanitarios deben llevarse a tiendas de jardinería, que están obligadas a eliminarlos correctamente.