Los plátanos rojos siguen siendo una novedad, por eso te sugerimos cómo comprarlos para que queden sabrosos y qué hacer con ellos.
Los plátanos no solo son amarillos
Los deliciosos plátanos amarillos son probablemente una de las frutas exóticas más populares disponibles en nuestro país. Los buscamos con entusiasmo y los tratamos como un refrigerio saludable o los usamos para preparar cócteles y ensaladas. Recientemente, sin embargo, estas sabrosas frutas tienen un competidor bastante original en el mercado, en forma de su primo rojo, que tiene una forma similar, pero es más corta, más voluminosa y cubierta con una piel de un sorprendente color marrón rojizo.
La fruta madura también tiene una pulpa cremosa, mantecosa, amarillenta y dulce con un delicado toque de frambuesa, por lo que muchos la consideran más sabrosa que la pulpa de los plátanos amarillos. Sin embargo, cuando nos encontramos con plátanos rojos por primera vez en una tienda, podemos considerarlos estropeados, porque aunque el color oscuro de su cáscara solo indica la madurez del fruto, no se parece a un clásico plátano amarillo.
Cómo comprar plátanos rojos
Desafortunadamente, a pesar de que los plátanos rojos son atractivos, sabrosos y saludables, comprarlos no es una tarea fácil, porque a primera vista es difícil evaluar el grado de madurez de la fruta. Si encontramos plátanos que no están completamente maduros y queremos probarlos, es posible que no queramos buscarlos más, porque su sabor amargo y desagradable ciertamente nos alienará. También será difícil de pelar, porque la piel de la fruta verde es dura y es difícil pelar la pulpa.
Para evitar decepciones, busque plátanos cuya cáscara sea de color rojo oscuro, hinchable al tacto y que tenga finas manchas oscuras en la superficie (similar a un plátano amarillo maduro). Sin embargo, cuando encontremos frutos duros e inmaduros, después de traerlos a casa, los dejaremos unos días en un lugar cálido y luminoso, preferiblemente cerca de las manzanas, hasta que estén blandos y maduros.

Plátanos rojos: una sabrosa fuente de minerales y vitaminas.
Por supuesto, no tenemos que convertirnos en fanáticos de los plátanos rojos de inmediato, pero vale la pena probarlos al menos una vez, porque la fruta madura tiene un sabor interesante y mucho valor nutricional. En su composición, además de una serie de minerales valiosos (que incluyen potasio, calcio, magnesio, fósforo), también contienen mucha vitamina C (más que las variedades amarillas de plátanos), así como otras vitaminas (A, E, K y grupo B), y también mucha fibra, azúcares naturales (sacarosa, fructosa, glucosa), antioxidantes y colorantes (incluidos los carotenoides).
Qué hacer con los plátanos rojos

Saben muy bien cuando se cortan en rodajas, se espolvorean con limón, se sazonan con miel, canela y cardamomo y se fríen en mantequilla, pero también son excelentes para preparar sabrosas galletas de plátano y avena con frutos secos y especias o un interesante pastel de plátano. También se pueden freír rebozados, hornear con otras frutas y arroz, o hacer panqueques y panqueques.
Los plátanos rojos también funcionan bien en platos secos, ya que se pueden utilizar para preparar, entre otros, guiso de pollo, pimiento, tomate y plátano, cuello de cerdo frito con plátanos y diversos platos orientales.
Los plátanos también en cosmética
Al igual que los plátanos amarillos, las variedades rojas también pueden tratarse como cosmético, porque su pulpa rica en nutrientes es ideal para preparar una mascarilla para el cuidado del rostro, cuello y manos, a menos que, por supuesto, seas alérgico a la fruta.
Algunas desventajas de los plátanos rojos
Si nos apetece comprar plátanos rojos, no deberíamos tener mayores problemas para comprarlos, porque ahora los podemos encontrar en muchos supermercados y grandes tiendas de abarrotes. Lamentablemente, como siguen siendo una novedad exótica en nuestro país, todavía tienen un precio bastante elevado, por lo que hay que tener en cuenta el coste de unos 20 PLN. por kilogramo de fruta.
A la hora de decidir comprarlos, también debemos recordar que los plátanos rojos no son aptos para todos. Deben ser considerados especialmente por personas que padecen diabetes y sobrepeso, porque las frutas son calóricas y tienen un índice glucémico elevado (100g equivalen a unas 100 kcal).